En nuestra boca habitan numerosos tipos de bacterias que a través de ella pasan a la sangre y afectan a otras zonas del organismo entre ellas al corazón. Numerosos estudios demuestran que existe una estrecha relación entre las enfermedades de la encía (enfermedad periodontal) y la enfermedad cardiovascular.
Conocemos que el tabaco, la obesidad, el estrés y el senderismo son factores de riesgo en las enfermedades cardiovasculares.
Recientemente a todo esto, la Sociedad Europea de Cardiología añade la periodontitis como factor de riesgo en estas enfermedades del corazón.
«Los pacientes con enfermedad en las encías tiene entre un25 y 50% más de riesgo de padecer una patología cardiaca».
¿Qué es la enfermedad periodontal?
La enfermedad periodontal tiene dos fases:
-Periodontitis: Es una enfermedad de origen infeccioso e inflamatorio que daña a los tejidos que sujetan al diente en la boca.
-Gingivitis: En su comienzo a la periodontitis se le denomina gingivitis, una inflamación de las encías como consecuencia de la acumulación de placa bacteriana caracterizada, por enrojecimiento de encías, inflamación y sangrado al cepillado.
¿Qué relación existe entre enfermedad periodontal y enfermedad cardiovascular?
Los microorganismos que se encuentran en la boca, presentes en la enfermedad periodontal, pasan a la sangre y la respuesta inflamatoria que se produce en el periodonto se extiende por todo el organismo. Esto provoca, un empeoramiento de la enfermedad cardiovascular de aquellas personas que la padecen y un mayor riesgo de contraerla en aquellas personas que no la padecen.
La enfermedad coronaria y las enfermedades cerebrovasculares son la primera y segunda causa, respectivamente, de muerte a nivel mundial.
En estudios que han evaluado episodios cardiovasculares, se ha observado un exceso de riesgo estadísticamente significativo de enfermedad cardiovascular aterosclerótica en individuos con periodontitis.
¿Qué debemos hacer para prevenirlo?
La prevención tiene un papel primordial a la hora de reducir la incidencia de la gingivitis y evitar su progresión a periodontitis.
Se recomienda prestar especial atención a la higiene bucal diaria a través de un control físico de la placa bacteriana con cepillo dental específico para el cuidado de encías e higiene interproximal y un cuidado bucodental con dentífricos y colutorios que contengan antisépticos seguros y eficaces contra la periodontitis.
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